el rincón del curioso/Jorge G. Boró
Tensa calma
La OPA italiana sobre Metrovacesa ha abierto el camino a otros grandes grupos europeos que ya han puesto los ojos en el mercado español

Tras la tormenta desatada por el "invasor" italiano a la caza y captura de su presa española, Metrovacesa para más señas, se vive una tensa calma en el sector inmobiliario español, en lo corporativo se entiende, a la espera de la evolución de la OPA hostil lanzada por los italianos o de nuevos movimientos que es más que previsible que se produzcan.
Aunque no tuviera éxito la OPA sobre Metrovacesa, ya ha abierto camino a que otros grandes grupos europeos pongan sus miras en el mercado inmobiliario español que tan buenos resultados produce, muy por encima de los niveles de otros países de nuestro entorno. Las cifras son claras y los resultados ahí están, en el sector residencial España encabeza las listas de producción europea.
Los últimos datos conocidos avalan todavía estos buenos resultados. No hay más que mirar a las hipotecas concedidas a los consumidores, aunque entre los profesionales del sector ya se manejan otros números, como son el endurecimiento de las condiciones y los préstamos que los bancos conceden a los promotores para emprender nuevos proyectos.
Donde antes se concedía hasta el 116% del valor de la promoción, y se incluía hasta el Impuesto del Valor Añadido (IVA), ahora se vuelve más a una financiación próxima al 80%. Y como todos los profesionales saben y temen, los bancos y cajas de ahorros tienen en sus manos el enfriamiento del mercado inmobiliario. Si cierran el grifo de la financiación el mercado se frenará. Habrá que ver cuántas vueltas están dispuestos a dar a ese cierre, si es que se produce, para comprobar qué pronunciada es la frenada, si hay parón en seco o se puede utilizar el sistema de frenado antibloqueo para que la parada sea gradual y un poco menos traumática.
En manos del sistema bancarios estamos en el sector inmobiliario y de su miedo o temor ante una subida de la morosidad. De momento los niveles siguen altos, esperemos que continúen por la buena salud de nuestra economía, de la que el sector inmobiliario junto al de la construcción sirven como motor en los últimos años.